De decálogo de Hugo Macdonald de su libro “How to Live in the City”, y retomado por el Diario el País de España. Es un buen referente para adaptar municipios y regiones, en momentos de crisis, hacer nuestros territorios habitables, en co-creación con la comunidad, con los vecinos, con los habitantes. Por lo que las ciudades deben ser:
- La ciudad verde. La ciudad debe propender por tener en casa y calles árboles, y plantas que permitan disminuir con su presencia la temperatura ambiente, y dar aire de frescura y mejorar la vista del paisaje urbano.
- La Ciudad Pública. La ciudad debe contar con abundante y generoso espacio público, y mobiliario urbano, para el goce y disfrute de la ciudadanía, la familia y la sociedad entera. No contar con espacio público, es privatizar la ciudad.
- La Ciudad debe ser doméstica. “El mobiliario urbano puede transformar una calle, convirtiendo un paisaje hostil en un lugar acogedor. No dar con una papelera es un fastidio. Las papeleras, los bancos o una iluminación elegante contribuyen a que la vida urbana florezca más allá de la puerta de nuestras casas”.
- La Ciudad debe ser entrópica. “Las primeras ciudades nacieron donde la gente se reunía para comerciar con bienes y contarse novedades. Un intercambio diversificado es la argamasa que ha mantenido siempre unida a una ciudad. Aunque hoy reconocemos la necesidad de que haya tolerancia, resiliencia y diversidad, la expansión urbana tiende a sistematizar el espacio y a crear guetos”. (…) “Las ciudades avanzan cuando son lugares fértiles para un intercambio diversificado”.
- La Ciudad debe ser densa. Las zonas urbanas facilitan la densificación. Sin que ello signifique la austeridad en el espacio. El espacio residencial y público debe ser abundante y generoso, no provocar hacinamiento, sino espacialidad de la sociedad, de los habitantes.
- La Ciudad Móvil. La ciudad debe permitir la integración a través del transporte público, eficiente, sostenible, e inteligente. Que el ciudadano y las familias puedan desplazarse de un lugar a otro, y disfrutar la ciudad.
- Señalizada.” El lenguaje verbal de nuestras calles influye en el carácter de una ciudad. Una buena señalización comunica mucho más que el nombre de la calle o la dirección del tráfico. Aunque todos llevamos teléfonos inteligentes en el bolsillo, los mapas y las rutas expuestos en las aceras ayudan a absorber mejor el entorno físico y a transitar por diferentes zonas en un contexto real y no virtual”.
- La Ciudad debe ser culta. La cultura es la expresión de la sociedad. No solo la cultura escenográfica del teatro. Es la cultura que hace habitable por la vecindad, y la solidaridad. La resiliencia, la tolerancia, y el respeto por la diferencia. Y que se expresa en el comportamiento público de sus habitantes.
- La Ciudad debe ser equilibrada entre lo antiguo y lo moderno. Las calles, los edificios, parques y residencias, hablan de la historia de la ciudad. La adaptación del espacio a la modernidad, y al crecimiento. Así como la conservación de su patrimonio, guardando el equilibrio entre la historia y la necesidad de los avances técnicos arquitectónicos y del urbanismo para hacer de la ciudad un espacio habitable y de calidad para propios y extraños, es la conjugación de la convivencia urbana.
- La Ciudad debe ser segura. La seguridad urbana, sumada a la tecnología y al smartphone, va más allá de los organismos de seguridad pública. Se trata de la seguridad solidaria, vecinal y humana. Que construye confianza social y cuenta con el respaldo institucional.
Fuente: https://elpais.com/elpais/2019/05/07/eps/1557221012_340665.html